miércoles, 28 de febrero de 2024

IÑAKI WILLIAMS

 


El lunes 19 de febrero jugaron en Bilbao, el Athletic Club y el Girona su correspondiente partido de liga de fútbol.

Se llevaban bastantes minutos de juego cuando el árbitro paró el partido durante unos siete minutos. La causa fue algún tipo de accidente de un espectador de la grada.

Durante esos minutos, los servicios sanitarios atendían al afectado, y los jugadores de ambos equipos intercambiaban opiniones. En el centro del campo se formó un corrillo entre diversos jugadores y el árbitro que hablaban.

Pero un jugador del Athletic se paseaba sólo por el césped, era Iñaki Williams. ¿Qué hacía Iñaki? Una cámara lo enfocó y se comprobó que rezaba. Unos segundos después, se entiende que finalizó su rezo y se santiguó.

O sea que, en cualquier trabajo, Iñaki estaba trabajando en su especialidad, se pueden aprovechar los segundos de un “parón”, para rezar, encomendar algo, interceder por una cuestión o persona.

Felicito a Iñaki Williams porque sabe aprovechar los “parones”. 

domingo, 14 de enero de 2024

LA HUMILDAD


 

La primera bienaventuranza dice: Bienaventurados los pobres de espíritu, porque de ellos es el reino de los cielos.

Los pobres de espíritu son los humildes. Cuando se está muy cogido por la soberbia, el orgullo, la vanidad, el amor propio, ¿qué hacer? Recurrir a Jesucristo, que es modelo de humildad. Hoy, fácilmente se aprecia el esfuerzo por sobresalir. Y resulta que la felicidad es vivir en la humildad. Es una misteriosa belleza la de la persona que se oculta, que no arma ruido, que acepta el plan que Dios quiere para ella.

La soberbia nos mete en un camino falso, porque la soberbia es no aceptarse como somos y a buscar continuamente ser el ombligo del mundo.

Carl Gustav Jung, médico psiquiatra suizo contaba algo sorprendente de sus pacientes de cierta edad. Añade que sufrían falta de humildad, y no se curaban hasta que no adquirían una actitud de respeto y de humildad ante una realidad más grande que ellos: Dios.

Sta. Teresa del Niño Jesús escribía a su hermana: Lo que agrada al Señor es verme amar mi pequeñez y mi pobreza, es la esperanza ciega que tengo en su misericordia. Mantengámonos muy lejos de todo lo que brilla, amemos nuestra pequeñez. (Carta 197). La pequeñez es el camino cierto y seguro.

S. Francisco de Sales decía: Los pensamientos que nos inquietan proceden del demonio, del amor propio o de la estima que nos tenemos. Estas son las fuentes de donde nacen nuestras turbaciones.  

martes, 26 de diciembre de 2023

DOCE UVAS


En muchísimos países existe la costumbre o tradición de que al llegar la medianoche del treinta y uno de diciembre, y al sonido o visión de las doce campanadas del final del día y del año, se toma una uva acompañando a cada toque de la campana. Como he dicho es una costumbre y tradición con la que se cierra un año y se abre el siguiente.

A veces, el espectáculo suele ser trasmitido por las cadenas de las televisiones. Y también a veces, en esa transmisión de las campanas se realiza sin el debido respeto a la dignidad de una persona: casi siempre la de una joven guapa, elegante, atractiva y algo desvestida que con simpatía trata de animar la operación de la toma de las doce uvas. 

Este último detalle merece la pena de una pequeña reflexión: cuando la esposa o el esposo se desviste en su habitación ante su cónyuge no hay ninguna grave alteración en la convivencia entre los dos. Por la sencilla razón, de que el esposo mira a su esposa, también en ese momento como una persona. Igualmente ocurre en la mirada de la esposa al esposo en idéntica situación. No ha fallado la concepción que se tiene del cónyuge. Así era la relación de Adán y Eva en el Paraiso y era incluso la que Dios mismo propiciaba.

Sin embargo, en el caso de la chica guapa que acompaña a las doce campanadas, la situación no es la misma. Algo desvestida dije más arriba, y su misión no sólo es tomar las uvas a cada sonido, es más, se ha convertido en objeto, ha deteriorado su persona. La gravedad está en esto mismo: no se ofrece como persona, sino como objeto.

Quien comprenda que uno de los valores más hermosos y grandes que tenemos es la dignidad como persona, sabrá entenderme. Aclaro la cuestión con un ejemplo más: Paseamos por una playa y vemos a muchísimas chicas guapas y muchísimos chicos estupendos, unos y otras con su correcto bañador y nos parece bien. Algunos, algunas, incluso muy elegantes. Los miramos como a personas. Más adelante nos cruzamos con un chico o una chica, en el que les falta una o más piezas del bañador: se está ofreciendo como un objeto de uso. Es muy parecido a una lata de coca-cola, la bebemos, la utilizamos y desechamos la lata porque como envase ha cumplido su misión, es un objeto.

Pero ¿ocurre los mismo cuando contemplamos la Venus de Milo? Evidentemente, no. 

 

martes, 19 de diciembre de 2023

UN DESCANSO A LA DOPAMINA


 

En el exceso de consumo de la felicidad, tiene parte importante la dopamina. Este neurotransmisor facilita la sensación de felicidad. Felicidad que nos puede llegar por el número de whastsApp que recibimos, de Facebook o de películas de amor que vemos. O por supuesto, por la adición al chocolate u otro ingrediente apetecible. Es el número de estimulantes y excitantes quienes provocan esta situación.

¿Qué conviene hacer? Moderar el trabajo de la dopamina. En el caso de que no lo hagamos, llegará un momento en el que los whatsApp o los Facebook o las películas románticas o policiacas, que tanto nos gustan, la afición por las fotos, no nos producirán el placer. Hemos llegado al hastío.

El remedio: dar vacaciones a la dopamina. Es decir, restringir lo que nos está dando placer y buscamos ansiosamente. Una persona en estado de ansiedad, irritable, con depresión e insomnio, necesita descanso de dopamina y para eso el mejor remedio es moderar, dar templanza a esos estímulos que tanto deseamos y buscamos con excesiva frecuencia. Una temporada de abstinencia, y pasado ese periodo, ese tipo de películas, de hacer fotos, de recibir mensajes, nos volverá a dar felicidad: la dopamina descansó y regresa nuevamente para darnos gusto por aquellas cosas.

viernes, 8 de diciembre de 2023

LA MORALIDAD DE LA INMORALIDAD


 

Decía un Jefe de Estado de un país europeo a su amigo Epafras, que apartarse de la disciplina del voto en una votación de ley o algo similar, en el parlamento del país, eso es una inmoralidad.

Justo, le respondió Epafras. Y ¿hacer pactos con un delincuente, con un Curro Jiménez, no es también inmoral?

Claro que sí, afirmó el ejecutivo, pero ciertamente, una inmoralidad no se limpia ni subsana con otra inmoralidad.

Cierto también, añadió Epafras. Sin embargo, la primera y la segunda inmoralidad solamente pueden blanquearse con un acto moral. Por ejemplo, con una heroica virtud. Nada hay más seguro para impedir la inmoralidad que, las virtudes de la justicia y la veracidad. ¿No piensas, añadió Epafras, que si en la política, en los negocios, los juicios… brillasen estas dos virtudes, la vida nos sería más honesta, agradable y feliz?

Su amigo, el Jefe de Estado, no respondió.

Y si aún permanece alguna duda, pregúntese a Teresa de Jesús y Ahumada, que de heroicas virtudes tenía algunos masters.

¿O es que la ejemplaridad la hemos enterrado en noviembre con el mes de los difuntos?

lunes, 27 de noviembre de 2023

LA UNIÓN DE AMISTAD CON JESUCRISTO, NUESTRO SEÑOR


 

Próximo el Adviento, bueno será dedicar tres minutos a mirar a JESÚS.

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Con las buenas obras avanza el reino de Jesucristo en el mundo y construyes ese mismo reino en el alma. Es así como la Presencia del Amor habita en la intimidad del amigo. Es Jesús en todo y por el que se actúa mañana, tarde y noche. Entonces, el buen siervo de Dios crece en deseos de no parar[1]. Finalizada una tarea, un encargo, y rápida y sosegadamente inicia otro: le empuja el amor. Pero no se considera propietario de ninguna de aquellas iniciativas y trabajos.

Todo se hace por Él y para Él.

Esta es la más grande aventura que puede concebirse: la íntima amistad con el Señor; contemplando en todo tiempo y lugar al Amado del alma, que sólo es posible si estás desasido de personas, de cosas y de sucesos. Porque todo es estiércol ante el verdadero Amor. 

                    Si el amor que me tenéis,

                    Dios mío, es como el que os tengo,

                    Decidme, ¿en qué me detengo?

                    O vos, ¿en qué os detenéis?[2]

En esta aventura, todo pasa a un segundo plano. En el primer plano sólo está Dios en el alma. Sin embargo, el cariño por muchas criaturas que fueron apareciendo en su camino, permanece en su corazón siempre enamorado. Por todos y para todos, anheló continuamente la salvación: las almas, el provecho de las almas es su intención permanente. La gran pasión es pues, amar a Dios, y que igualmente todos los que pertenecen a su familia y ambiente, le amen localmente. Las buenas obras ayudan a que otros muchos también amen al Amado: cooperador de la redención, corredentor: Andad arraigados y fundados en Cristo, pues de él estáis llenos (Col 2, 7 y 10).

En medio de los muchos trabajos, el alma busca constantemente la oración, en la que se llena de sustancia espiritual, porque sólo en su Presencia es fuerte para continuar con toda la empresa: las múltiples ocupaciones no le distraen del primer plano de su vida: la unión con el Señor. Cuando el alma se desenvuelve así, la contemplación no perjudica a la acción, ni la acción a la contemplación. Es el Señor que hermosea el alma.

Jesús le había pedido esa unión de amistad y para lograrla le dijo: Ama la humildad. Este ejercicio le facilitaba la comprensión y la caridad. Ha entendido que humildad y caridad van unidas y la unión de estas dos virtudes en el alma, y siempre con la gracia de Dios, favorecen ser atento, cordial, agradable, alegre, constante.

A María, siguiendo la imitación de Isabel, la llamaba La Madre de mi Señor. A ella acudía constantemente con jaculatorias, peticiones y miradas implorando su protección y la de los suyos.



[1] Teresa de Jesús. Camino de perfección, 36-5-

[2] Teresa de Jesús. Si el amor que me tenéis.